Sobre todo en los grandes procesos de selección, la fase de la entrevista puede pasar por varias etapas. Y una de ellas puede ser una entrevista de trabajo por teléfono. Para que hagas un resumen de tu CV, para que muestres que conoces otro idioma o sencillamente para descartar candidatos para las siguientes fases. Puede parecer muy fácil, pero para este tipo de entrevistas hay una serie de tips que te conviene conocer para superarlas con éxito.
La entrevista de trabajo por teléfono: sus objetivos
Las entrevistas de trabajo por teléfono son una parte de los procesos de selección. Sobre todo si se trata de los masivos.
Su principal objetivo es descartar candidatos. Por eso suelen estar dirigidas a conocer a la persona de primera mano.
Una de sus finalidades es que expongas tu CV. ¡Pero atención! Esto no significa que lo debas seguir paso a paso. Sino que expliques tus puntos fuertes y hagas una descripción breve de tu perfil profesional. Ten a mano tu CV y detente solo en las partes que sean más sobresalientes. Y esto son tus logros. Tanto académicos como profesionales. Si tienes periodos largos sin trabajar en tu CV debes aprender a explicarlo.
Otra de sus metas es resolver algunas cuestiones previas a tu selección. Como comprobar que dominas otra lengua. O que sabes expresarte correctamente por teléfono.
¿Qué pasa si no puedo coger la llamada?
Si la llamada se produce sin que haya habido acuerdo previo sobre el día y la hora y no puedes atender correctamente a la entrevista de trabajo por teléfono, lo mejor es que no fuerces la situación.
Responde con educación e indica que en ese momento no puedes atender al reclutador como merece. Explica también por qué, quizá estás en el transporte público o en la calle.
Indica varias opciones para que puedan contactarte. Da un intervalo amplio de tiempo, por ejemplo, de 9 a 13, y varios días diferentes de la semana.
O bien ofrécete a devolver la llamada preguntando qué momento es el más adecuado para hacerlo. Asegúrate de que tienes el nombre de la persona con quien has de contactar y su número de teléfono. Lo importante es que muestres interés.
Atiende la llamada con comodidad
Una de las ventajas de la entrevista de trabajo por teléfono es que puedes elegir dónde hacerla. Así que no dudes en llevarla a cabo en un sitio en el que estés cómodo o cómoda.
También es importante que haya buena cobertura para que puedan escucharte con claridad. Y para que la llamada no se corte.
El sitio que escojas debe ser tranquilo, alejado de ruidos. Y sobre todo sin interrupciones.
Mantén también una postura cómoda pero erguida. Eso hace que tu voz no suene apagada o entrecortada. Y recuerda respirar correctamente.
Prepárala como harías con cualquier otra entrevista
El hecho de que no sea presencial no significa que la entrevista de trabajo por teléfono no tenga importancia. Debes ser consciente de cómo preparar una entrevista de trabajo.
En ese sentido, tienes que haber investigado antes a la empresa y las características de la vacante que quieren ocupar.
Esto no solo dará buena imagen de ti. Además, te dará a ti información imprescindible sobre qué dirección tendrá la conversación, sobre lo que pueden preguntarte. Y podrás preparar las respuestas con antelación. Qué es lo que puedes aportar a la empresa y cómo encaja tu perfil con ella.
Cuida el lenguaje y la expresión
Tu expresión verbal será la única referencia personal que el reclutador tenga de ti. Por eso es imprescindible que cuides tu lenguaje. Evita las expresiones demasiado informales. Recuerda que no estás hablando con tus amigos, sino con quien decidirá contratarte.
Que no te jueguen una mala pasada los nervios. Selecciona tu vocabulario.
Si no entiendes o no has oído bien una pregunta, hazlo saber. Con educación. Es mejor asegurase de haber entendido correctamente lo que se te pregunta que dar una mala respuesta.
Sé sintético en tus respuestas y huye de la incontinencia verbal. Trabaja el orden de tu discurso y su estructura. Demuestra que eres todo un profesional.
Tampoco hagas cosas que no harías en una entrevista personal o por videollamada. No comas ni masques chicle. Tampoco te distraigas con otras actividades, como entrar en tus redes sociales o consultar tu correo electrónico.
Espera al menos dos segundos después de que el entrevistador haya acabado de hablar. Así te aseguras de que no le interrumpes, lo que daría muy mala imagen.
La sonrisa telefónica
En una entrevista de trabajo por teléfono es evidente que la otra persona no te está viendo. Pero la voz transmite muchas emociones. Lo saben bien quienes trabajan con ella, como los locutores.
Para crear buena impresión en una entrevista de este tipo, trata siempre de mantener lo que se conoce como la «sonrisa telefónica». Aunque no estés en tu mejor momento, estés cansado o estresado. Si no te resulta posible mejorar tu ánimo, prueba solo a hablar mientras sonríes. Solo eso ya da un gran cambio a tu voz. Nadie se dará cuenta de que la sonrisa es forzada pero tu voz sonará mucho más agradable y transmitirás confianza.
No olvides hacer preguntas
Como en cualquier otra entrevista, también en una entrevista telefónica debes plantear cuestiones al reclutador. Para ello lo mejor es tomar nota de las características del puesto durante la conversación. Y que tengas estas notas delante.
Apunta también la información que se te dé para que no se pase nada por alto. Y al mismo tiempo, anota las cuestiones que no te hayan quedado claras. Serán estas las que debas resolver al final de la entrevista o cuando te pregunten si tienes alguna observación que hacer.
Estate muy atento a no preguntar nada sobre lo que ya te hayan informado. Si lo haces, dará la impresión de que no has escuchado y no tendrán buena imagen de ti.
Saber despedirse es un arte
Cuando estés seguro de que la entrevista ha finalizado, da las gracias al reclutador por la oportunidad.
Pregunta al entrevistador si tiene alguna duda sobre tu perfil o sobre ti. Indícale que estarás encantado de poder resolverla.
Finalmente, muestra interés en el puesto y sé positivo. Despídete con educación y evitando de nuevo frases demasiado informales.